CEBM

Resultados:

Actualizado a 31 de marzo de 2020.

Se ha sugerido que pueden ser de utilidad en el manejo del paciente COVIDD-19:

  • los inhibidores de la enzima convertidora de angiotensina (inhibidores de la ECA-1), como enalapril y ramipril,
  • y los antagonistas de los receptores de angiotensina como el candesartán y el valsartán.

 

Pero no hay pruebas de su eficacia ni balance beneficio-riesgo.

Revisan la farmacología de estos medicamentos y los mecanismos por los cuales el virus infecta las células y emiten conclusiones sobre si estos medicamentos deben usarse mientras se está a la espera de los resultados de los ensayos clínicos.

¿Estos medicamentos desempeñan algún papel en el tratamiento de COVID-19? y ¿Las personas que actualmente toman estos medicamentos deben dejar de tomarlos antes de una infección o cuando ocurre una infección?.

  1. Las acciones de los inhibidores de la ECA y los BRA son complejas, y los resultados generales de su uso en el contexto de COVID-19 son difíciles de predecir.
  2. COVID-19 presenta unas glicoproteínas de pico o espículas en superficie que le permiten entrar en las células huésped. Aprovechan la acción de la enzima convertidora de angiotensina (ACE-2), expresada en las membranas celulares (incluyendo alveolares pulmonares).
  3. Reducir la actividad de ACE-2 en las membranas celulares teóricamente podría reducir la capacidad de COVID-19 para penetrar en las células. Sin embargo, los inhibidores de ACE-1, como enalapril y ramipril, no inhiben la ACE-2.
  4. No está claro si tal regulación positiva sería deseable o no.

 

Conclusiones:

Se desconoce el balance beneficio riesgo de estos fármacos en pacientes con COVID-19.

No es prudente instituir ninguna terapia farmacológica sobre la base de una hipótesis mecanicista no probada, ya que los daños inesperados pueden ser mayores que los beneficios esperados.

Se sugiere que no es prudente usar inhibidores convencionales de ACE-1 o BRA para tratar COVID-19.

A los pacientes que ya están tomando inhibidores de la ECA-1 o ARA se les recomienda continuar tomando sus medicamentos. Consejo de Hipertensión de la Sociedad Europea de Cardiología y Colegio Americano de Cardiología.

Pacientes con hipertensión grave o insuficiencia cardíaca crónica, antes de una infección:

  • Continuar el tratamiento antes de una infección. Los paciente en quienes es más probable que estos medicamentos sean beneficiosos son aquellos en quienes es probable que se necesite un tratamiento continuo, y en quienes los efectos adversos de COVID -19 son más probables. En ausencia de más información, tales pacientes probablemente deberían continuar tomando sus medicamentos.

Y el tratamiento durante una infección:

  • Continuar el tratamiento durante una infección. Probablemente sea mejor aceptar los beneficios comprobados de la terapia continua para la enfermedad cardiovascular grave y continuar la terapia con inhibidores de la ECA o BRA si ocurre una infección aguda, incluso a riesgo incierto de daños.

Pacientes con diabetes leve o enfermedad cardiovascular o ambos toman estos medicamentos por sus beneficios a largo plazo. Retirarlos durante una infección aguda causará poco daño y es razonable.

Quienes obtienen un beneficio marginal de estos medicamentos, pero que corren un alto riesgo de infección debido a la exposición (por ejemplo, trabajadores de la salud jóvenes) pueden razonablemente dejar de tomar estos medicamentos durante la epidemia.

Al recuperarse de la infección, el tratamiento debe continuarse o reanudarse, según corresponda.

Este consejo, debe revisarse cuando los resultados de la extracción de datos de registros de pacientes o ensayos clínicos estén disponibles.

 

Referencias bibliográficas:

https://www.cebm.net/covid-19/angiotensin-converting-enzyme-ace-inhibitors-and-angiotensin-receptor-blockers-in-covid-19/